Foto de portada, Roda de Marea Danza
27 de julio 2022
Hay iniciativas pequeñas que se plantan como semillas y van creciendo, poco a poco, ofreciendo cada año su fruto. Fem(me) dansa es una de ellas. La bailarina y creadora Ana Lola Cosín Torada plantó una, casi por azar, en su Sagunto natal cuando unió dos de sus campos de acción, el feminismo y la danza. En su quinta edición, este pequeño festival al aire libre vuelve a convocar a creadoras e intérpretes en las calles de la localidad para aproximar la danza a su vecindario.
Sagunto, 25 kilómetros al norte de Valencia, es una ciudad patrimonial divida en dos núcleos (el histórico y el industrial). Mientras que el teatro romano y su rico entorno acogen en agosto el festival de verano del IVC-Institut Valencià de Cultura ,-un consolidado Sagunt a Escena que alcanza este año su 39 edición con propuestas de teatro, música, circo o danza-, el nucleo costero abraza la danza gracias a las tres jornadas diseñadas por Cosín, respaldadas por el ayuntamiento a través de su Área de Igualdad.
Este fin de semana (29-31 julio) se pueden ver los espectáculos Roda, de Marea danza (mejor espectáculo de calle de los Premios de las Artes Escénicas del IVC 2021), Mermelada, de Helena Alemany, Comala, de Federica Fasano, Si me buscas, me encuentras, de Paula Serrano y Migrare, de Maduixa. Repartidas entre la plaza de la Concordia y el Triángulo Umbral, todas las obras tienen en común el papel protagónico de las mujeres y el orígen próximo de sus creadoras.
Ana Lola Cosín explica su trabajo a escolares de Faura
El ideario de la inquieta y afable programadora del ciclo se materializan en estas tres jornadas de danza de proximidad para todos los públicos. Durante nuestra conversación quiere destacar que el impulso del proyecto fue compartido con Paula Peña y Camí de Nora, así como que en la coordinación y programación es fundamental el equipo del Área de Igualdad municipal. Experimentada como bailarina en compañías como la joven Gerad Collins, Eva Bertomeu CD, Mou Dansa, La casa amarilla, y en la misma Maduixa, donde permaneció cinco años como intérprete de Mulier (hasta que se bajó de los zancos para seguir su propio camino), Ana Lola Cosín es titulada en Danza Contemporánea por el Conservatorio Superior de Danza de Valencia y en Coreografía e Interpretación por el Conservatorio Superior de la misma ciudad. Es también Ingeniera de Montes, titulación que obtuvo mientras dedicaba a la danza, su gran vocación, una parte considerable de su tiempo. Desde que su madre la apuntara a clases de ballet no ha dejado de seguir la estela del movimiento, una ola que la lleva por proyectos propios como Solmonki, junto a Débora Ruiz, o ajenos, como intérprete en Kabul, la última creación de Rosàngels Valls. En estas últimas semanas ha estado centrada en la residencia de creación Relacions geològiques d’amor, una de las que bajo este nombre organiza Hort Art, el proyecto de Pere Bodí y Alex Guerra en la pequeña localidad valenciana de Faura (a escasos 6 km de Sagunto), del que hablamos en este artículo. También ha podido probar y enseñar su trabajo reciente en Bancal escènic, el lugar de residencia y muestra que Circarte organiza en una de las zonas de huertos de la Vall de Guadalest.
En la playa te espero
Antes que todos lo sepan, de Paula Serrano, foto de Jesús Robisco
Uno de los dos escenarios principales de Fem(me) dansa es el «ágora» del paseo marítimo de Puerto de Sagunto, una amplia plaza donde desplegará su espiral de energía Marea Danza. Las cinco bailarinas del colectivo, que aproxima la danza flamenca y española al contemporáneo, dejaron esta creación en manos de Sara Cano, quien las ubicó en un lugar de conexión de la danza de raiz local con acentos actuales. La circularidad como referente para el rito y la celebración protagoniza esta obra rítmica y festiva. La saguntina Helena Alemany rememora en Mermelada a las mujeres que le han influido en su vida. La joven bailarina y coreógrafa estudió en Valencia para después ampliar su formación en el DART Theater de Berlín. Esta es la primera vez en que muestra una pieza propia en su ciudad.
La italiana residente en Alicante Federica Fosano y Paula Serrano protagonizan el cartel del segundo día de festival, que se desarrolla en el Triángulo Umbral. La primera ofrece un solo que evoca presencias y ausencias corpóreas a través de una danza que alterna la sutilidad con la potencia. Serrano está desarrollando una investigación sobre cómo la falta de visión repercute en el movimiento; una muestra de la misma se verá en el dúo junto a Isabel Álvarez. El cierre de la programación será a cargo de Maduixa con Migrare, obra estrenada el pasado mes de mayo con la que continúan desarrollando narrativas con bailarinas en zancos. En esta ocasión el tema es la violencia, explotación y drama que sufren las mujeres migrantes.
Punto caliente
El festival nació en torno a las celebraciones del 8 de marzo, aunque la post pandemia lo situara en el mes de julio, hecho que puede favorecer su visibilidad al ser temporada alta de turismo en el municipio. Además, la visibilización y refuerzo de la creación hecha por mujeres debe darse durante todo el año, afirma Cosín. Con esa idea en la mente y con la intención de consolidarse, crecer y llegar cada día a más público trabajan tanto ella como el Ayuntamiento de una localidad que, como muchas otras, ofrece pocas oportunidades para acercarse a la creación contemporánea. De momento, el acento feminista y la conexión con el talento local o próximo ya ha llevado obras de Lorenza di Calogero, Noelia Arcos, Marta García, Paula Puchalt, Eva Serrano, Lucía Jaén, Dahilena, Eva Bertomeu, Charo Gil-Mascarell, Margarida Mateos o Dunatacà. En pocos días, su quinta entrega se hace realidad.