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Foto de Johann Le Guillerm en Secret
El circo contemporáneo se olvida del más dificil todavía y enamora con su poesía a un público de cercanía.
Se apagan las luces y comienza a suceder lo inimaginable. Ambiente de intimidad, imaginación desbordante, proezas físicas disfrazadas de sencillez, artilugios ideados por mentes creativas y cientos de recursos fascinantes. Así es el circo de ahora, el que alejado de tópicos y redobles de tambores ha reconducido la destreza circense hacia los nuevos lenguajes escénicos.
Sin grandes montajes, dando a lo sencillo el valor de único, su capacidad de conexión está más que contrastada porque entretiene, asombra y hace disfrutar a la vez.
Abril es en Barcelona y otras ciudades catalanas el mes del circo, el Circ d’ara mateix es el nombre del ciclo que, entre el 20 de marzo y el 26 de abril, se está desarrollando en espacios como el Mercat de les Flors, La Central de Circ, el Ateneu Nou Barris, El Trapezi de Reus o l´Estruch de Sabadell. Más de 40 espectáculos en 74 funciones, actividades paralelas como charlas, talleres, sesiones de circo en familia… un programa amplio, muy variado, con un denominador común, normalizar la presencia de uno de los géneros que mayor curiosidad despierta hoy en dia.
Este ciclo nos está permitiendo ver perlas como Secret de Johann Le Guillerm, un artista venerado en todo el mundo. Un equilibrista, encantador de objetos, creador de atmósferas únicas capaz de concebir números hipnóticos ayudado por su destreza con la mecánica, la geometría, la sorpresa, el dominio de lo ingobernable. Igual crea un torbellino de humo que atraviesa la pista montado en un ingenio de madera que evoca un fósil ancestral. Con una estética heterodoxa y algo punk, el francés consigue mantener las mentes y las bocas abiertas durante 90 minutos en su carpa para 400 espectadores.
Cataluña es un vivero de buenos artistas circenses, algunos recién aterrizados, como Joan Català que en Pelat interactúa habilmente con un largo tronco en un juego de complicidad con el público. Otros acumulan largos años de fidelidad al género, como Escarlata Circus, que acaba de estrenar un Cabaret Petrificat en el que el juego con cuchillos, piedras y arcilla se acompaña de un fino humor y una efectiva puesta en escena.
Todavía quedan dias para disfrutar del ciclo de circo actual pero cuando concluya seguirá el espectáculo también en lugares como Amposta, Granollers, Figures, Manresa o Sabadell, ciudad que en 2014 prevé inaugurar una gran carpa para alojar programación regular, actividades dinamizadoras y a artistas residentes.
Joan Català